viernes, 29 de abril de 2016

Nietos

Los temores que invaden a una persona respecto a su herencia, respecto a lo que dejará a los suyos, son varios, pero quizás podamos resumirlos en dos aspectos, uno que yo denominaría familiar, y otro, fiscal.

El primero hace referencia al hecho de si mis descendientes aceptaran o no mi voluntad, si surgirán o no polémicas, si todo seguirá o no igual. Son hipótesis futuras que solo el tiempo resolverá.

La fiscal, ¿Cuánto pagaran mis herederos por el Impuesto de Sucesiones?. Tenemos que recordar, que este impuesto cedido a las Comunidades Autónomas no es igual en todas, en unas se paga en otras no, como en post anteriores ya trate.

Centrándonos en Comunidades en las que sí se paga, una solución serían los Nietos.

El Impuesto de Sucesiones es progresivo, es decir se paga mas cuanto mas se tiene, por lo que si introducimos a mas herederos(hijos o nietos, no extraños) en nuestra herencia, la distribución de la misma y su coste fiscal será menor.

Por otro lado, los nietos al igual que los hijos, también se benefician de las reducciones que el Impuesto establece, y si son menores de 21 años mas aún.

Como todo en la  vida, surge la pregunta del hijo al padre, ¿Sí, claro, heredan tus nietos? y son menores o mayores y podrán disponer de lo que reciben. Solución : Legamos la nuda propiedad a los nietos y el usufructo para el hijo. Resultado: Pagamos menos Sucesiones, "controlamos a los nietos".




Pd: Recuerdo el sentido de este blog, y la forma de escribirlo, y a quien se destina el mismo.
Un saludo

miércoles, 20 de abril de 2016

Deslinde

Las situaciones en las que se encuentra un heredero cuando recibe una herencia, son muy variadas y también, "variopintas", más aun cuando dicha designación es totalmente imprevista y prácticamente se encontraban causante y heredero, sin relación alguna.

En tal supuesto, el desconocimiento, sobre todo en temas de fincas rusticas es tan variado que puede dar lugar a situaciones curiosas y también conflictivas.

Es el caso, que sabemos que hemos recibido un olivar, por ejemplo, pero tenemos problemas con el colindante, y preguntando en ámbito familiar, nos confirman que esa cuestión ya la tenia la persona a la que hemos heredado. Surge la pregunta ¿Cómo arreglo, el lio? . ¿Hasta donde llega mi finca? ¿Ha pasado el plazo para arreglar la situación?

Parecen cuestiones simples, pero en el ámbito rural están a la orden del día, problemas de lindes.

Una de las acciones que podemos plantear es la de "deslinde", cuyo objeto es individualizar, concretar la finca, y sus linderos, su perímetro, utilizable en aquellos casos en los que los limites de los terrenos de distintos propietarios están confundidos. Confusión de linderos y colindancia son los presupuestos básicos para que la acción prospere.

En cuanto el plazo, no hay problema, es imprescriptible.


Mucho tiempo sin escribir por este blog, vuelve Haerentia, con muchas ideas, un poco de tiempo y comenzamos de nuevo.
Saludos